En un movimiento estratégico para enfrentar los nuevos aranceles impuestos a productos provenientes de China e India, Apple ha enviado 1.5 millones de iPhones a Estados Unidos. Este operativo, realizado en marzo, involucró seis vuelos de carga que transportaron cerca de 600 toneladas de dispositivos desde India. La compañía busca evitar interrupciones en el suministro y mantener los precios estables en un mercado clave.
Sin embargo, la pregunta persiste: ¿es suficiente para cubrir la demanda? Aunque este envío refuerza el inventario para varios meses, Apple también ha intensificado la producción en India, con planes de fabricar 10 millones de unidades adicionales este año. Esto podría cubrir hasta el 50% de la demanda en EE.UU., siempre que la distribución sea eficiente. A largo plazo, la empresa busca diversificar su cadena de suministro, reduciendo su dependencia de China y fortaleciendo su presencia en India.
El impacto de los aranceles ya se siente en el mercado, con una caída del 9% en las acciones de Apple y una pérdida de más de $300 mil millones en su valor de mercado. Este escenario refleja los desafíos que enfrenta la compañía para adaptarse a un entorno comercial incierto, mientras intenta garantizar la disponibilidad de sus productos y proteger su rentabilidad.